Tanto Sadie Plant como VNS Matrix representan la rama radical del ciberfeminismo, pero existe otra rama menos radicalizada donde encontramos el Old Boys Network, responsables de 100 Anti-Theses of Cyberfeminism (1997). A este grupo, además, se le ha de reconocer su trabajo en cuanto a la introducción del ciberfeminismo a nivel institucional dentro de festivales dedicados al ámbito tecnológico.
El acto más destacable sin duda fue su participación en el festival Documenta X de Kassel, celebrado cada cinco años, donde organizaron la Primera Internacional Ciberfeminista, creada con el objetivo de denunciar los privilegios masculinos que dan vida a la sociedad patriarcal. Lograron reunir a treinta y ocho mujeres de doce países distintos.
Durante este evento, en el que participaron tanto programadoras como artistas, fue cuando se escribieron las 100 Antítesis que hemos mencionado anteriormente y que básicamente consistían en una autocrítica que a su vez ilustraba de forma clara lo que es y no es el ciberfeminismo.
Por otro lado Enredadas en la Red de Guatemala realiza una acción interesante La Escuela Feminista Itinerante. EFÍMera dedica su trabajo a procurar detener la violencia digital machista que se pueda generar. Para eso, ha creado un espacio de formación, donde se ofrecen toda una serie de cursos y jornadas de reflexión a adolescentes y mujeres de nicaragüenses. Como dicen ellas mismas en su página web: “(EFÍmera) se basa en la construcción colectiva del conocimiento y la educación popular, conceptos fuera de lo común en el ámbito tecnológico”.